Una excelente forma de conocer los resultados económicos del año que finaliza es realizando un cierre anual contable. Con esta información, las empresas pueden tomar decisiones financieras y tributarias para enfrentar de mejor manera el futuro del negocio. Es recomendable realizar este proceso a finales de diciembre.
¿En qué consiste este procedimiento? Se cierra o cancela las cuentas que engloban los ingresos, gastos, costos de venta y de producción. De esta forma se pueden llevar estas cifras a las cuentas de balance, es decir, los activos, pasivos y patrimonios. El objetivo de este proceso es conocer los resultados del periodo y dejar en cero los saldos de las cuentas, para iniciar un nuevo registro de las operaciones del año que comienza.
Antes de empezar el cierre anual debes seguir las siguientes recomendaciones: