En el contexto globallas estafas digitales se han vuelto el pan de todos los días. Por ejemplo Check Point Research, La División de Inteligencia de Amenazas de Check Point Software Technologies Ltd, una empresa dedicada a la ciberseguridad a nivel mundial, ha detectado que los sitios dedicados a la vacuna al COVID-19 aumentaron en 300% en los últimos 8 meses.
Se han detectado 7 056 nuevos dominios relacionados a la vacuna desde principios de noviembre de 2020, de ellos se contabilizan 294 como potencialmente peligrosos. Para comparar, entre julio y octubre del mismo año había registrados solo 1 773 nuevos dominios sobre las vacunas. Este incremento se explica con las muy nuevas iniciativas de vacunación que han implementado gobiernos e instituciones de salud, tarea que se ha tomado por muchos países recién en este año. Sin embargo, el incremento de sitios también lleva con sigo un buen número de sitios fraudulentos que ofrecen vender de manera privada las vacunas o alguna especie de preinscripción para acceder a las dosis. Como resultado, muchos usuarios entregan datos que ningún organismo oficial les pediría, como datos financieros, claves y usuarios de cuentas bancarias, tarjetas, etc. Incluso puede haber personas que han comprado vacunas cuando en realidad no están a la venta.
Si bien este número solo contabiliza los sitios relacionados a las vacunas, no podemos dejar de mencionar otro tipo de estafas como las financieras. Actualmente, por la pandemia muchos quedaron con situaciones económicas precarias que a su vez no les hace elegibles a crédito. Ahí es donde entran los ciberdelincuentes ofreciendo créditos y beneficios que suenan perfectos para los usuarios en apuros. Muchas veces lo hacen haciéndose pasar por instituciones financieras conocidas y de prestigio, lo que hace que sea más fácil captar datos de la víctima.
Esto se hace incluso si uno desea entrar a su cuenta de banco, entra a un sitio que se ve muy similar al oficial y deja sus credenciales de acceso, podría estar dando paso a robos por medio de la información que uno erróneamente ingresó en el portal falso. Sin embargo, aunque parezca que en algún momento caeremos en la trampa, es relativamente sencillo verificar si un sitio es falso o no.
El Internet puede ser muy seguro si estamos pendientes de todas las alertas. Si hacemos uso de portales de instituciones probas y hemos verificado su veracidad, no hay por qué temer. Las cosas se han hecho más sencillas, rápidas y seguras gracias a los servicios en la web, por lo que es mejor estar informados. Los sistemas de encriptación, biométricos y otros protocolos hacen que la falla en la seguridad normalmente sea humana, así que si nosotros mismos nos cuidamos no hay de qué preocuparse. Por ejemplo, Sofya cuenta con sistemas de talla internacional para salvaguardar tu información y la de tu empresa. Escríbenos y descubre más de nuestros servicios.